jueves, 14 de febrero de 2008

Datos Adicionales

Hoy me levanté con dolor de estómago. De la nada. Así como para año nuevo me levanté volando de fiebre y con anginas, y como me ha pasado todos los años, todos los meses con las anginas...

"Laura no seas estúpida, te vas a sacar las amigdalas pero el problema sigue estando...!!!"
Palabras de las únicas personas que saben que acá adentro, todo está mal...Y entonces decidí cambiar mi punto de vista de la vida...y todo va mejor. Mucho mejor.

Recomiendo una lectura a este super-resúmen acerca de lo que es el naturismo y las enfermedades psicosomáticas; términos que están super relacionados entre sí.
Así que, doctores de urgencias 43511111 mi "indigestión" no va a curarse con ese remedio (por suerte muy rico, pero no viene al caso) , y sí tengo fiebre (yo conosco mi cuerpo y vos no!), y otra cosa: no es culpa de la comida, es culpa de que se acerca el sábado y así no me dejarán salir.








Naturismo

Filosofía de vida curativa

El hombre de todos los tiempos, en pos de su felicidad, ha buscado la forma de evitar la enfermedad, y cuando ésta se ha producido, de curarla. Muchos son los métodos terapéuticos que han surgido en distintas épocas y países, pero nos limitaremos a pasar revista a los tres principales: la alopatía, la homeopatía y el naturismo.
La medicina alopática es la que se enseña oficialmente en las universidades y practican la mayoría de los médicos. Su objeto es combatir el síntoma que presenta el enfermo a través de remedios contrarios a su naturaleza (contraria contrariis curantur). Considera a los microbios y virus como causantes de casi todas las enfermedades.
La medicina homeopática, creada por el médico alemán Cristóbal Federico Hahneman (1755-1843), fue una reacción contra la medicina alopática u oficial. Su sistema consiste en aplicar en dosis mínimas (infinitesimales) las mismas sustancias que, en mayores cantidades, producirían en el hombre sano síntomas parecidos a los que se trata de combatir (similia similibus curantur: los semejantes se curan por los semejantes). A pesar del adelanto que significaba para la época, la homeopatía no llenó las aspiraciones de su creador y menos aún las de la humanidad sufriente. La importancia de la homeopatía es haber sido la primera valla contra los desbordes de la alopatía y haber preparado el terreno para el resurgimiento de la medicina natural.
EL NATURISMO MEDICO
Tenemos en fin la medicina naturista o natural, o sea el naturismo médico. Su antigüedad se pierde en la noche del tiempo. El primer hombre, en estado salvaje, andaba desnudo por el mundo y obedecía únicamente la voz que le dictaba su instinto, aún no pervertido por la civilización; gozaba de una salud que podemos llamar perfecta y sólo comparable a la que presentan actualmente los animales salvajes. Como éstos, el hombre prehistórico no conoce más enfermedades que las heridas que recibe en sus luchas. Es dable presumir lo que hacía el habitante de las cavernas para curarse en esos casos. No había antisépticos, ni vendas, ni médicos, ni farmacias. ¿Se encontraría por eso desamparado? De ninguna manera. Estaba la Naturaleza toda para prestarle ayuda.
¿Que sistema terapéutico es ese que empleaba el hombre prehistórico? El natural.
Desde ya, estamos viendo cuán antiguo es el naturismo. Sus orígenes no se remontan a Kuhne o Kneipp como creen algunos. Tampoco a Hipócrates, como creen otros. Nació con el primer hombre y lo acompañó mientras éste obedeció la voz de su instinto. Pero en cuanto el ser humano empezó a agruparse en tribus y se vieron los primeros albores de la civilización, la inteligencia fue poco a poco desplazando el instinto. El hombre deja de obedecer a la voz de la Naturaleza que siempre le ha guiado y se deja llevar por los conocimientos que él y sus semejantes han adquirido; la razón suplanta al instinto y todo pasa por el tamiz de su cerebro. Entran en escena supersticiones, prejuicios y otras fuerzas negativas que anulan la gran fuerza del instinto, oscura pero sabia. Así es como el hombre se aparta de la Naturaleza y por ende, del naturismo.

SALUD Y ENFERMEDAD

El hombre es una verdadera trinidad, compuesta de cuerpo, mente y espíritu. El desarrollo y funcionamiento integral de cada elemento, así como la armonía necesaria que debe reinar entre ellos, nos da el hombre integral, el hombre sano. No puede hablarse de salud integral si existen desproporciones entre esos elementos.
Para alcanzar ese estado de salud integral, son varias las condiciones necesarias. En primer lugar el factor hereditario. Luego están los factores adquiridos por el mismo individuo durante su existencia: medio ambiente, profesión, forma de vida y muy especialmente el régimen alimenticio.
Hablando en términos muy sencillos, podemos decir que una persona está sana cuando esta limpia. Pero no nos referimos solo a la limpieza exterior de la piel, sino muy especialmente a la interior, que se refiere a todos los tejidos y en último término a la sangre.
Ahora bien, si la sangre se impurifica, ya comienza el estado de enfermedad. Las sustancias que intoxican la sangre podemos denominarlas “sustancias morbosas”, es decir sustancias que enferman. ¿De dónde vienen esas sustancias que pasan a la sangre? Muchas causas las originan, pero todas se sintetizan en una: la vida antinatural, es decir contraria a las leyes naturales que rigen la existencia humana.
Refiriéndonos a los tiempos que corren, podemos decir que la vida del hombre moderno no puede ser más antinatural: come y bebe en forma irracional, distribuye mal el tiempo para el trabajo y el reposo, se hace esclavo de los vicios, etc. Llevado por un loco afán de progreso mecanicista, ha descuidado todo lo demás, olvidando la máquina más maravillosa de todas: la máquina humana. Y ésta, como es natural, se ha resentido por tantas torpezas cometidas en su contra. Así vemos un número fantástico de enfermos que pululan en hospitales, asilos y consultorios, los cuales se llenan rápidamente, haciéndose necesario crear muchos más. Pero no es así como se resuelve el problema, como no se resuelve el problema de la delincuencia creando más cárceles.
Hay que tener en cuenta que el hombre comete torpezas contra su salud, no una vez, sino diariamente y aún varias veces al día. Llega un momento en que los órganos mencionados se sobrecargan de trabajo y no pueden seguir funcionando con la debida eficiencia. Es entonces cuando las sustancias morbosas, no pudiendo ser expulsadas, quedan retenidas en el organismo, depositándose en los tejidos e impurificando la sangre. Podemos decir que en ese preciso momento comienza el estado de enfermedad. Hay que prestar mucha atención a este concepto, porque es fundamental para el naturismo. La enfermedad no se produce de repente, como cree la mayoría de las personas, sino en forma progresiva y gradual. Para el naturismo la enfermedad no es una espada de Damocles que pende sobre cada persona, sino la resultante de un largo proceso de errores y torpezas cometidas contra un sistema de vida irracional.

LOS SÍNTOMAS Y SU SIGNIFICADO

Cuando comienza el estado de enfermedad, generalmente la persona no siente molestia alguna, porque el cuerpo tiene mecanismos compensadores que tratan de localizar y combatir el mal. Pero la persona, que dice sentirse bien, no cambia su sistema de vida y sigue intoxicándose cada vez más y más. Entonces los mecanismos compensadores, ante el aumento creciente de trabajo, se sienten impotentes y aparecen algunas molestias, que no constituyen por sí solas la enfermedad -y esto es importante- sino que son síntomas, es decir, manifestaciones exteriores de la enfermedad asentada en la intimidad de los tejidos y en la sangre.
Así vemos a una persona que nunca se ha quejado de su salud, presentar dolores de cabeza, o bien diarrea, estreñimiento, falta de apetito, insomnio, etc. Nada de esto constituye de por sí la enfermedad. Son sólo señales de alarma, toques de atención que indican que ese organismo no funciona en debida forma. ¿Que hacer cuando un centinela nos avisa que se aproxima el peligro?
Aquí ha llegado el momento de establecer claramente la diferencia que existe entre la medicina oficial o alopática y la medicina naturista. El médico alópata, en presencia de cualquiera de las molestias enunciadas, sólo ve un mal que es necesario combatir a toda costa. Cuanto más rápido desaparezca, mayor será el éxito; así opinan médico y enfermo. Para cada síntoma prescribe una “solución”: analgésicos, astringentes, laxantes, etc. Como es natural, esas drogas químicas no tardan en producir su efecto: desaparecen los síntomas. Librado momentáneamente del mal, el paciente cree estar curado y sigue su sistema de vida anterior. Su cuerpo continúa acumulando impurezas y no tarda en presentarse de nuevo la molestia. Recurre otra vez a las drogas y se establece un verdadero círculo vicioso en que cae el pobre enfermo y del cual es más difícil salir cuanto mayor ha sido la duración.
Es necesario entender de una vez por todas que las drogas no curan ni podrían curar las enfermedades. Solo sirven para “tapar” los síntomas, dando la falsa ilusión de haber curado. Por esto, la medicina oficial o alopática -que se aprende en las universidades- está muy lejos de ser una ciencia; se trata solamente de una pseudo-ciencia basada en el error y que no conduce más que al fracaso.
El síntoma es una voz de alarma de la Naturaleza. Cuando se presenta, hay que buscar la causa que lo origina, para así extirparla de raíz: desaparecida la causa, desaparece el efecto. Eso es lo que hace el naturismo. Hacer lo contrario es hacer lo del avestruz, que entierra la cabeza creyendo así evitar la catástrofe que se avecina.





Pero seguimos.....



Enfermedades Psicosomáticas:

El término psicosomático se puede definir como el proceso psíquico que tiene influencia en lo somático. La medicina reconoce la importancia de los procesos emocionales en la aparición y desarrollo de algunas enfermedades, pero este extremo es difícil de cuantificar y precisar por depender de factores y variables difíciles o imposibles de estudiar con el método científico.Aplicado a los individuos, se le llama psicosomático a aquel tipo de personalidad psicótica que desarrolla síndromes de enfermedades imaginarias o reales como un mecanismo de autodefensa del yo y de este modo evitar pasar por pasajes de vida que son para el sujeto contrarios a su estructura emocional o vivencial. Otro de los aspectos de este tipo de personalidad, y quizás el más común es que desarrolla cuadros somáticos para atraer la atención de otros a quienes considera superiores a sí mismo.

El Día de los Enamorados

El día de los enamorados torturados no me desperté,
hoy quiero dormir, escribí tantas canciones pensando en vos, pensando en mí.
No soy culpable pero tengo la culpa,
no me importa nada, pero demasiado me importa haber renunciado.
No quedaba otra, pero deshauciado me quedo y no es una forma de decir,
hay que vivirlo para entender,
es como cantar y coserse la boca a la vez.
En la calle del Fez, I never gonna do it without the Fez on my Steely Dan
samurai mi daikiri de harakiri
mi milonga de poronga triste y sola (o bien acompañada) no pasa nada.
Pero ese olor a carne quemada es mi corazón, es mi corazón...
Hay que vivirlo para entender es como cantar y coserse la boca a la vez.
Todavía tengo marcada tu almohada
a veces oigo voces tuyas que se quejan,
y ahora ¿quién se queja?
Es como quedarse desnudo bajo la lluvia hirviendo
y todos riéndose ja ja ja de mí.
Es como cantar y coserse la boca a la vez.
Matame...y te espero en el cielo.



-El día, Andrés Calamaro.






Puedo empezar a escribir con mil cosas. Puedo copiar y pegar todo lo que he publicado en otros blogs y no quise borrar, pero... ¿para qué? Si puedo escribir sobre el presente. Lo que pienso. ¡Eso es lo que quiero!
Entonces puedo escribir sobre hoy, sobre el día de los enamorados y lo que pienso al respecto, que es, de última, una de esas partes que tengo casi escondidas y que sin embargo me definen por cada cosa que hago.
No creo en el día de los enamorados solamente porque es un día para que los negocios sigan aprovechandose de nosotros y bla bla bla. No creo tampoco en esa justificación. Si yo tuviera a alguien ahora conmigo, estaríamos festejando y regalándonos cosas. Como pasa en el día del padre, de la madre, del amigo. Sabemos que es un invento: pero lo festejamos igual. Y seguimos la orden de las empresas de comprar, festejar, pintar el mundo de rosa. Es inevitable, siendo que vivimos en un mundo regido por las normas del mercado - queramos o no.
Lo que iba a decir es que directamente, no creo en el amor. Creo en la pasión, creo en la amistad, creo en la confianza. Creo que eso sí es amor. Pero el amor de una pareja, que jura su amor por siempre, no lo creo.
No creo que pueda vivirse solo del amor (léase: no se puede vivir del amor),
No creo que unas personas puedan quererse hasta no cansarse, para siempre, por siempre, felices.
No creo que alguien necesite sólo de alguien para vivir.
Y entrando en el ámbito personal: no creo que alguien pueda quererme, necesitarme, pensar en mi, lo que sea. El resto de las necesidades siempre son mayores, siempre son más indispensables que una sola persona...
Para qué, entonces, atarse a alguien, sabiendo que a la larga te va a hacer mal? Para qué empezar algo sabiendo que va a tener fin?
Puedo entender también que el amor se puede sentir. Y lo entiendo, porque, quiera o no, lo siento. Siento esa necesidad de verlo, de tenerlo cerca, de que no se vaya de al lado mio. Nunca se vaya de al lado mio. No se puede elegir querer o no a alguien, pero si se puede elegir qué hacer con esos sentimientos. Yo elijo escaparme, ahorrando un poco de decepciones, lágrimas, dolor, angustia, incertidumbres....Pero también perdiendome de mucho. Y estando (¿inevitablemente?) sola.

Hola Mundo

Hola Mundo, he vuelvo al ambiente bloggero.

Hola Mundo, daaaale no revivirá,

pero esta es su segunda edición.

Hasta cuándo? Por qué?

No lo sé..........


Pero si hay tanto para ver, para pensar sobre... , para escribir sobre...
no me oculto más y vuelco un poco de lo que veo,
de lo que siento,
de lo que pienso,
transofrmandome a veces en una enamorada, en una escritora, en una loca, en una cantante, en una fotógrafa, en una pensadora, en una luchadora, en una débil.....
que de última, siempre (y en cada uno de los casos) voy a ser yo.





Beban de mi mundo,
oh yeah