domingo, 30 de marzo de 2008

Mambos

Necesitarte es mi agonía, lo que me quedan son solamente esperanzas.
Esperanzas.
Que hacen que mi totalidad seas vos,
vos, que sos nada.
Esperanzas que son actos, que es vida, que es razón;
esperanzas que me hablan y me hacen creer en el amor.
Necesitarte real, necesitarte al lado mio y que existas,
para que seas mi único brillo.
Es ser por vos.
Mi vida, mis actos, mis ideas, mis cambios,
por vos, que aún no existis.
Agonía es saber que sos indispensable,
que no encuentro razones pero que siempre vas a ser una.
Qué espero, qué razones tengo,
de dónde han nacido los sentimientos más vivos y mortales que me llevan a una oscuridad finita, que me encierra y me grita tu nombre, me cuenta de vos. ¡Existis! Y no te tengo, y me matan las desilusiones, y se me va el alma queriéndote, sabiendo que estás lejos, pero que tu corazón lo está más.
Me hundo, me hundo en el desamor, en las heridas que me produce seguir viviendo esperanzada.
En vano. En vano.
Para qué ser tuya si no existis,
para qué encontrarte si en ningún lado estás,
para qué pensar si son solo sueños, ilusiones puras que vuelan en mi aire y jamás te van a llegar. Jamás el aire te va a contar de mi amor, de mi vida,
vos no sos mio. Cada día te sueño, cada día sos más irreal, y vos no me sentís.
Hace un esfuerzo, escuchá la intensidad de mi grito de agonía, de muerte. Sentime. Entendeme: hace mucho que no me enamoro al encontrar una mirada, hace mucho que no se derrumba lo que construí por mi. No sé actuar, ni controlarme, ni vivir. Y mucho menos se amarte y no ser correspondida.





-Fin ? No sé, mirá lo que ando escribiendo....